Carlos Ghioldi de COMISIÓN GREMIAL - LA TOMA, Rosario: "Estimados compañeros y compañeras:
Enviamos este documento producido por el dirigente Victorio Paulón. Es interesante para conocer una posición sobre este conflicto que lamentablemente no ha sido del todo difundida.
Seguros que todos aquellos que valoramos la democracia sindical y el debate fraternal entre militantes obreros podremos enriquecernos al conocer estas posiciones, así como las del oficialismo de la conducción del sindicato de Villa Constitución.
Esperando que sea de utilidad aprovechamos para enviarles un fraternal saludo proletario."
El final de la pelea de los trabajadores de Parana Metal deja duras enseñanzas para los militantes sindicales.
El primer error fue sacar el eje del conflicto del puesto de trabajo y trasladarlo a la calle. Abandonar el territorio propio donde se defiende lo que se tiene (el derecho a un puesto de trabajo) y llevarlo al espacio publico donde el primer ausente es el patrón, equivale a enfrentar e incomodar a nuestro aliado principal que son los demás trabajadores y sumar presión sobre el gobierno para dejar a la patronal fuera de la pelea.
El primer error fue sacar el eje del conflicto del puesto de trabajo y trasladarlo a la calle. Abandonar el territorio propio donde se defiende lo que se tiene (el derecho a un puesto de trabajo) y llevarlo al espacio publico donde el primer ausente es el patrón, equivale a enfrentar e incomodar a nuestro aliado principal que son los demás trabajadores y sumar presión sobre el gobierno para dejar a la patronal fuera de la pelea.
El final demuestra que la salida encontrada cuando el conflicto estaba exhausto y el gobierno muy complicado,fue inevitable. Los trabajadores se encuentran con una patronal llena de energia, sin desgaste alguno, logrando sus objetivos con plata del estado y sedienta de producir el escarmiento.
No podía ser de otra manera porque la lucha carecía de una conducción estratégica. Para colmo de males, en el mejor momento del despliegue de fuerzas con el pueblo movilizado, el sindicato transforma esa manifestación solidaria en un acto de campaña para la interna de la CTA encolumnándose con la expresión mas irracional de la oposición al gobierno. Fue una especie de “Villazo” al revés. Fue como tirar por la borde el duro aprendizaje de tantos años de sacrificio para construir un sindicato autónomo al servicio de los trabajadores.
La patronal, famosa por el conflicto del casino hace pocos años aplicó y sigue aplicando la misma receta y esto afecta al conjunto de los trabajadores. Imaginemos cuanto cotiza en el mundo de las patronales poner de rodillas a la UOM de Villa Constitución. Preguntemos por el comentario entre los vecinos de esa ciudad históricamente solidarios con los reclamos obreros que piensan de la forma en que se condujo este conflicto. Tantos errores juntos ya se parecen a una política pergeñada para producir la derrota. Que dirá, por ejemplo Pablo Miceli después de contar públicamente que tras golpear tres veces las puertas del cielo, Dios lo mandó de vueltas para conducir ese conflicto. En las elecciones de la CTA obtuvo el 30% de los votos, ¿será que el viejo proletariado industrial de vanguardia decidió desobedecer al santísimo? O simplemente que no se debe trasladar los conflictos del estado donde la lucha es casi virtual al duro territorio donde reina la dictadura patronal?
Paraná Metal una lucha perdida donde cerca de mil trabajadores siguen creyendo en la organización sindical democrática y esperan respuestas nuestras para seguir luchando por sus derechos.
Victorio Paulon
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